
Sigo funcionando por cursos. Para mi los años se cuentan de septiembre a junio, no de enero hasta diciembre. Es la herencia inevitable de haber sido estudiante pertinaz, más allá de lo recomendado y responsable. Antes de empezar las vacaciones y de que se inicie el curso 2018-19, queríamos evaluar esta asignatura que nos hemos inventado: conflictópolis.
En el primer trimestre del curso 2017-18, emprendimos con Rafa una tarea largamente meditada: empezar un blog en el que poder hablar de nuestra práctica profesional, sí, pero también teníamos el deseo de tener un lugar donde poder expresarnos sobre otras cosas que nos iban sucediendo. Nuestra práctica profesional es eminentemente personal, y cuando tratas constantemente problemas humanos, tu dimensión como persona se filtra en tu quehacer diario. No somos máquinas, somos personas: este es uno de los leitmotiv de los posts que hemos estado escribiendo, y me doy cuenta al mirar atrás, no porque hayamos escrito de manera estratégica hacia esa dirección. Unido a este primer aserto, las personas somos complejas, diversas y una mezcla interesantísima de pensar, sentir y hacer, por hacer un ultrarresumen. Y lo que nos hace personas es relacionarnos con otras, el ser humano es social o no es. En ese relacionarnos, en esa cocreación que hacemos las personas al entrar en relación surge todo: los vínculos, las emociones positivas, las negativas y el conflicto. Y ahí estamos nosotros, intentando comprender y acompañar.
La palabra co- crear está últimamente muy de moda; Pero a pesar de ello, quiero reivindicarla, ¿sabéis por qué? Porque este proyecto con Rafa desde el inicio es una cocreación nuestra. Pero no quiero olvidar a las personas que nos leen, que nos comentan qué les gusta y qué no les gusta. Porque también sois cocreadores, junto con nosotros, de este espacio. Porque escribimos para ordenar nuestras ideas, pero también para que nos ayudéis a ordenarlas.
También quiero hablar del compromiso, que hemos adquirido con nosotros mismos al escribir cada semana un post. A veces ha sido difícil cumplirlo, la mayoría de vosotros sabéis cómo son las vidas de los cuarentones: llenas desde que amanece hasta que se pone el sol de obligaciones, prisas y transporte público (el tiempo que paso en él es abominable). Pero este compromiso, mirando hacia atrás ha sido un compromiso con nosotros mismos para encontrar un espacio de reflexión que nos ha enriquecido, que nos ha divertido y que nos ha hecho crecer. Os queremos dar las gracias por estar al otro lado. Al final ha sido un compromiso con nosotros mismos para cuidarnos, una habitación propia donde descansar y volver con más fuerza al mundanal ruido. Y también quiero reivindicar el cuidado personal para poder tratar con personas que necesitan un acompañamiento en sus conflictos y dilemas.
Durante el mes de agosto no publicaremos nuevas entradas puesto que todos, incluidos vosotros, debemos aprovechar la pausa estival para refrescar nuestros pensamientos y enriquecer nuestras ideas.
Las vacaciones de verano son un periodo destinado al descanso. No obstante, en ocasiones son también un periodo de recapitulación de lo que nos ha sucedido durante el ejercicio que concluye y de forja de nuevos propósitos para el venidero. Antes de despedirnos queremos transmitiros tres elementos que podéis tomar en consideración para vuestra vida a partir de septiembre, si queréis, como esperamos, que el nuevo curso os aporte una búsqueda de la felicidad aún más fructífera.Parten de la reflexión de un exabogado americano, trabajador social y terapeuta, Sr. Will Meyerhofer y que son muy inspiradoras:
En primer lugar, secundamos la idea de que la autonomía personal es un prerrequisito esencial para cualquier proyecto vital que aspire a tener un sentido propio y profundo de la existencia. El verano es un buen momento para conversar con nosotros mismos sobre la manera en que podemos crear o consolidar espacios de autonomía personal sin los que es difícil que podamos decir que tenemos las riendas de nuestras existencias.
En segundo término, nos parece muy interesante el poder identificar nuestras habilidades. Todos necesitamos sentirnos capaces de hacer algo bien, y de que se nos reconozca. Muchas veces, durante el periodo laboral, los deberes continuos hacen que tengamos la sensación de realizar las cosas a medias, a trancas y barrancas, tanto en el trabajo como en el resto de nuestras obligaciones. La pausa veraniega nos permite hacer algunas cosas más a fondo y prepararnos para darle más importancia, durante el resto del año, a aquellas en las que somos hábiles y disfrutamos: tomarnos esa pausa para pensar en qué somo buenos y seguramente nos hace felices.
Por último, no existe posibilidad de vida feliz sino tenemos un entorno social desvinculado de nuestra necesidad de ganarnos la vida. Tal vez durante el año hemos tenido una vida social limitada, por cansancio, por desánimo, por inercia, y por las inmensas obligaciones, y hemos ido reduciendo nuestro mundo cotidiano al trabajo y a la familia más cercana, que no nos puede disfrutar ( ni nosotros a ellos) en todo nuestro esplendor. Sabemos desde antiguo que los humanos somos animales sociales, y nos desplegamos plenamente si también tenemos un entorno donde los vínculos no surgen de una obligación o de un interés, sino de una voluntad desinteresada. Aprovechemos el verano para reforzar esos vínculos: cultivemos las amistades, la familia extensa, todo lo que sea un alimento esencial para nuestro ser social.
Y a los que hayáis tenido un año no del todo satisfactorio, a los que lleguéis con la lengua fuera y el alma en vilo, o incluso a los que el verano os parezca una pausa terrorífica donde no os quedará otro remedio que afrontar algunos demonios, sabed que este blog está pensado para vosotros ( y para nosotros, porque esos monstruitos mentales los compartimos).
El compartir es lo que más nos ha gustado de estos meses de andadura, compartir partes de esta experiencia tan curiosa que nos ha tocado en suerte, y que comúnmente llamamos vida.
¡Feliz verano!
Rafa y Eve
¡Saludos y que volváis con nuevos y nutritivos posts! 😊👍🏽
Gracias Fran!!! igualmente!!! Llegamos al verano realmente exhaustos…… nos vemos al inicio del nuevo curso !!!